Opiniones personales. Opiniones ajenas. Mafalda. Otros

lunes, 29 de abril de 2013

Esto es lo que hay...


La sociedad de los adolescentes hoy

Autor/es: Iñigo Lázaro Clavijo (16 años).
Volumen 6. Nº1. Marzo 2013

La sociedad de los adolescentes, hoy, es una sociedad de grupos y abierta, lo que quiere decir que es posible, a través de unos caminos, acceder a los dos grandes grupos. A continuación enunciaremos los dos grandes grupos y explicaremos los medios por los cuales se puede entrar y salir de los grupos.

Lo dos grandes grupos son los “guays” y los “frikis”. Friki proviene del inglés y significa “aquel que se sale de lo normal”, por lo tanto, aquel que no siga los estándares marcados pasa automáticamente al grupo de los frikis.
Los factores que intervienen en la asignación al grupo de los guay son:

la belleza: el estar cachondo/a, ser atractivo, te asegura un puesto seguro en el grupo guays;
      la fuerza: característica de los que denominamos matones; la oportunidad de meterse a un gimnasio siempre es una buena opción;

y, por último, la moda: aquí entran en juego varios elementos como la ropa, accesorios, cortes de pelo, música…o costumbres como son el beber alcohol y el consumir drogas; el botellón es una quedada en la cual puedes presumir de tu maestría en beber alcohol y consumir drogas (una buena oportunidad para integrarte y poder entrar en el grupo).
Detrás de todo esto hay un gran pilar: el falso respeto o, como yo lo llamo, temor; temor a ser marginado socialmente o sufrir bullying. Puede que estés marcado por una marca a fuego en la frente donde ponga friki; entonces, todos tus intentos por entrar serán una causa perdida y te verás sumido en un subgrupo dentro de los guays: los “hueleculos”. Un grupo despreciado tanto por frikis, por venderse, como por guays, por no llegar a ser enteramente uno de ellos. En este subgrupo hay una simbiosis entre aceptación y sumisión, donde pierdes toda pizca de dignidad que había en ti.

Conclusión: Esta sociedad es una jungla angosta en la cual puedes estar en lo más alto o en lo más bajo. Pero el estar en lo más bajo no es tan malo; sólo se debe encontrar un grupo en que te respeten y acepten tal como eres, es decir, un grupo en el cual poder sentirse bien con uno mismo, poder pensar por uno mismo, poder elegir, tener personalidad.

Siempre hay medios para repensar la educación 

No hay comentarios:

Publicar un comentario