Opiniones personales. Opiniones ajenas. Mafalda. Otros

domingo, 24 de febrero de 2019

El saber no ocupa lugar

LA MARIHUANA (PORRO)
·         A. Efectos de la marihuana.
·         B. Algunos estudios sobre la marihuana.
A. EFECTOS DE LA MARIHUANA
1. ¿Qué es la marihuana? Es una planta (cannabis sativa) con los efectos tóxicos de una droga debido a que contiene una sustancia química llamada delta-9 tetrahidrocannabinol (THC). Para obtener la droga se puede usar toda la planta. Las hojas dan el kifi, de las flores se obtiene la grifa, y con la resina de las flores se forma el hashish o hachís. Los cigarrillos de marihuana suelen llamarse porros.
2. Efectos de la marihuana.- Los efectos dependen de la concentración de thc, de las características y enzimas de cada persona, de la vía de administración y la experiencia, incluso del ambiente. Sus efectos son peores en jóvenes. Algunos efectos de la marihuana son inmediatos, otros se producen con el uso continuado.
3. Efectos inmediatos de la marihuana (varían):
  • Unas veces hay euforia e irrealidad; otras veces dificultades de atención y temores.
  • Luego se altera la percepción sensorial; aparece un exceso de sensibilidad y sugestionabilidad que produce altibajos y cambios de humor. La marihuana disminuye el control afectivo con pérdida de dominio propio. Perturba el cerebro originando una situación de risa tonta con la mirada perdida, fantasías, desorientación, incluso alucinaciones.
  • Más adelante aparece la dejadez, indiferencia, pasotismo, pérdida de energía para moverse, falta de ilusión y de motivación, que invita a tomar de nuevo la droga.
4. Efectos secundarios de la marihuana (también varían):
  • efectos físicos: La marihuana deteriora los pulmones y las células, sobre todo los glóbulos blancos y los espermatozoos. Acelera las pulsaciones. Disminuye las defensas. Daña la garganta (faringitis, tos). Un sólo porro deja más alquitrán en los pulmones que varios cigarrillos entre otros motivos porque se fuma sin filtro (bronquitis, asma).
  • efectos psíquicos: La marihuana distorsiona la percepción estropeando la sensibilidad, disminuye la memoria y la voluntad, dificulta pensar, aprender y tomar decisiones, produce ansiedad y agresividad alterando el equilibrio psíquico. Hace perder interés y motivación por las cosas normales (vida, higiene...) para centrar la atención en la droga y sus rituales. La marihuana crea dependencia psíquica disminuyendo la libertad mientras el afectado piensa que sucede lo contrario. Causa daños cerebrales. Aumenta el desorden personal y se deteriora el aspecto externo.
  • efectos sociales: La marihuana produce disgustos familiares, inestabilidad laboral, pérdida de capacidades profesionales, actos delictivos, propagación de la droga, aislamiento en grupos de drogadicción. La marihuana es el paso previo a drogas más fuertes (a menudo basta con que uno del grupo empiece).
  • Un dato curioso: la palabra asesino procede del árabe hassasin que significa los bebedores de hachís. No es que los porreros sean asesinos, pero el dato es significativo: la marihuana no es ninguna broma.
5. ¿Cómo se empieza a tomar marihuana? Los motivos de comenzar son parecidos a los de otras drogas (imitación, estar de moda, deseo de olvidar problemas, etc.). Normalmente se empieza por una calada o un porro que te regalan. El paso siguiente es comprar: así uno se introduce más en el ambiente, aprendiendo nuevas formas de drogarse. Luego se pasa a vender, etc.
6. ¿Cómo dejar de tomar marihuana? La marihuana disminuye la voluntad y crea adicciones psíquicas; por esto es costoso dejarla. Para conseguirlo se recomienda: tener el tiempo ocupado, cortar con los ambientes de droga y buscar el apoyo de alguien (ver el tema drogas). Pero lo mejor es no empezar a tomarla. Así me insisten varios amigos que dejaron la droga: para dejarlo lo mejor es no comenzar, y para no empezar lo mejor es no ir con gente que se drogue; y no plantearse dudas.
7. ¿Todos esos efectos se producen fumando marihuana un poco? No siempre suceden todas las consecuencias, y desde luego los efectos de la marihuana son menores si se fuma menos, (lógico). Pero no debe olvidarse que las neuronas dañadas se regeneran con dificultad, y un sólo porro afecta al cerebro, como cualquiera puede apreciar.
8. ¿Cómo se conocen los efectos de la marihuana? Hay dos o tres caminos para conocerlos: hacer una investigación propia, estudiar lo que otros han investigado seriamente, o mezclar ambos sistemas. En cambio, es poco exacto fiarse de uno o dos casos privados, porque los efectos a veces varían.
9. ¿Es necesario fumar marihuana para conocer sus efectos? No, no. Un médico no necesita enfermar para conocer los efectos de una dolencia, basta analizarlos en sus pacientes o aprender de otros médicos que los hayan investigado.
10. ¿Duran mucho los efectos de la marihuana en el cerebro? (Hacen esta pregunta desde México). Los efectos varían de unas personas a otras. Respecto a los daños cerebrales se puede decir:
  • La marihuana afecta al cerebro a los pocos minutos de su uso. Esto es muy evidente.
  • La marihuana (el THC) se elimina con dificultad y tarda aproximadamente un mes en suprimirse. Los efectos cerebrales disminuyen conforme se va eliminando.
  • El cerebro es capaz de amoldarse y usar otras conexiones neuronales cuando algunas neuronas quedan dañadas. Por esto, unos estudios muestran la ausencia de efectos pasado un mes, mientras que otros estudios hablan por ejemplo de enfermedades psicóticas más frecuentes en usuarios de marihuana.
B. ALGUNOS ESTUDIOS SOBRE LA MARIHUANA
1. Marihuana y memoria a corto plazo.- En 1989, Schwartz y otros realizaron un test sobre este tema entre jóvenes de unos 16 años de similares características educativas e intelectuales. Los fumadores de marihuana fallaron mucho más en la memoria a corto plazo. Al cabo de un mes sin droga, aún presentaban fallos superiores a los no fumadores.
2. Marihuana y actividad psicomotora.- En 1991, se reunió a diez pilotos experimentados, y se les entrenó con un simulador de vuelo. El test comenzó con un aterrizaje previo. Luego, unos fumaron un solo porro, y otros un cigarrillo sin marihuana. El vuelo simulado se repitió una, cuatro y venticuatro horas más tarde. En las tres pruebas, los que habían fumado marihuana tuvieron importanes dificultades para alinear el avión en el centro de la pista. Y ninguno notó que la marihuana le había afectado.
3. Marihuana y esquizofrenia.- Un estudio sueco de 15 años de duración sobre 55.000 militares mostró que los consumidores habituales de marihuana tienen seis veces más probabilidad de volverse esquizofrénicos.
4. Marihuana y envejecimiento.- El premio Nobel Dr. Julius Axelrod descubrió que el índice de regeneración celular de los consumidores de marihuana es menos de la mitad del normal.
Sir William Paton, profesor de farmacología en Oxford, descubrió que la atrofia cerebral en jóvenes consumidores de marihuana es equivalente a la de ancianos de 80 años.
5. Información sobre la marihuana proporcionada en la web de algunos gobiernos:



sábado, 2 de febrero de 2019

El saber no ocupa lugar

LA LEALTAD
·         A. ¿Qué es la lealtad o fidelidad?
·         B. Lealtad con los demás.
·         C. Lealtad con uno mismo.
·         D. Lealtad con Dios.
A. ¿QUÉ ES LA LEALTAD O FIDELIDAD?
1. ¿Qué es la lealtad? La lealtad o fidelidad es el hábito de cumplir los compromisos adquiridos. Es una virtud deseable, porque la condición de traidor o desleal nadie la quiere.
2. ¿Lealtad y responsabilidad se parecen? En ambos casos se cumplen los compromisos adquiridos, pero hay una diferencia: la persona leal lleva a cabo lo pactado porque desea cumplir la palabra dada. En cambio, la persona responsable realiza sus deberes porque son deberes, porque asume sus obligaciones. Ambas cualidades se apoyan entre sí.
3. ¿Lealtad y justicia se parecen? La lealtad forma parte de la justicia, en el sentido de que cumplir los compromisos adquiridos es un deber contraído con alguien.
4. ¿Lealtad y constancia se parecen? Más bien se refuerzan una y otra. La constancia ayuda a cumplir la palabra dada cuando su realización lleva tiempo. La lealtad ayuda a ser constantes en el esfuerzo, por lealtad a lo prometido.
5. ¿Cómo ejercitar la lealtad? Hay varios campos donde practicar la lealtad, que saldrán en los siguientes apartados. Veamos ahora algunos ejemplos:
  • Acudir a las reuniones acordadas.
  • Evitar hablar mal de los demás.
  • Cumplir los propósitos.
6. ¿Hay tipos de lealtad? La fidelidad admite varios matices según se trate de lealtad con Dios, con los demás o con uno mismo. Y en cada uno de estos casos hay aspectos interesantes según el compromiso sea expreso o sobreentendido. No es un tema complicado, pero veamos despacio estas situaciones.
B. LEALTAD CON LOS DEMÁS
- a) Lealtad explícita.
1. ¿Qué es la lealtad explícita con los demás? Es la lealtad más visible. Se trata de cumplir los compromisos expresamente adquiridos con los demás. Y equivale a cumplir la palabra dada, sea por escrito o verbalmente. Se aplica en cosas pequeñas como presentarse a la hora convenida, y en asuntos de mayor gravedad como cumplir un contrato profesional, o ser fiel en el matrimonio.
2. ¿Lealtad matrimonial? Consiste en cumplir los compromisos adquiridos en el matrimonio. Por ejemplo, serían contrarios a esta lealtad el trato frívolo con otra pareja, y el desentenderse del cónyuge o de los hijos. También sería opuesto a la lealtad matrimonial las continuas recriminaciones o broncas. Mientras que la lealtad se fortalece con los comportamientos que mejoran la concordia familiar.
- b) Lealtad sobreentendida o implícita.
3. ¿Qué es la lealtad implícita con los demás? En este caso, la lealtad con los demás se ejercita cumpliendo los compromisos que por sí mismos van unidos a una situación o a un hecho, aunque no se haya dicho previamente nada. Por ejemplo, la amistad incluye el deseo de buscar el bien del amigo aunque no se diga expresamente. Por esto, duelen más los daños causados por un amigo, pues al sufrimiento normal se añade la deslealtad.
4. ¿Más ejemplos? Hay muchas lealtades sobreentendidas. Por ejemplo:
  • En una empresa se supone que todos buscan el bien de la fábrica. Y si un jefe o empleado perjudicara al propio trabajo o favoreciera a la competencia, sería considerado desleal, aunque no haya habido compromisos verbales previos.
  • Esta lealtad implícita es una cualidad importante que abarca muchos campos de la vida y hay ejemplos abundantes: si un católico hablara contra la Iglesia, estaría siendo desleal; si un jugador contribuyera voluntariamente a que su equipo perdiera, se le llamaría traidor, pues se sobreentiende que los miembros de un equipo deben lealtad a sus colores.
C. LEALTAD CON UNO MISMO
- a) Lealtad explícita.
1. ¿Qué es la lealtad explícita con uno mismo? Es la lealtad a las propias convicciones, una fidelidad más interior que suele llamarse coherencia, y equivale a cumplir la palabra dada a uno mismo, sosteniendo con firmeza los propios ideales. Aceptar incomprensiones, persecuciones, antes de permitir rupturas entre lo que se vive y lo que se cree: esta es la coherencia. Aquí se encuentra quizá el núcleo más íntimo de la fidelidad.
2. ¿Un ejemplo fácil? Si uno es hincha intenso de un equipo, sería incoherente si se comprara una bufanda del equipo rival.
3. ¿Un ejemplo más serio? En asuntos de fe, falta coherencia cuando no se vive conforme a lo que se cree, y también es incoherente la actitud de quien en ocasiones se comporta como católico, y otras veces olvida su condición. La lealtad consigo mismo invita a mantener los buenos ideales en toda circunstancia y en todo ambiente, siendo cristianos de tiempo entero, que procuran vivir siempre conforme a las exigencias de su fe, incluso en los negocios, o en verano, etc.
4. ¿Y si faltara coherencia en la fe? La falta de practicar la fe y las actitudes intermitentes pueden acabar en derrumbamientos, si el ambiente se torna adverso.
- b) Lealtad sobreentendida o implícita.
5. ¿Qué es la lealtad implícita con uno mismo? A veces los propios ideales son conocidos con claridad, y éste es el sentido habitual de la coherencia. Pero también hay una coherencia sobreentendida respecto a uno mismo cuando los propios principios se suponen. Por ejemplo, quien se droga se causa un daño y no es coherente con la idea básica de evitarse males a sí mismo.
D. LEALTAD CON DIOS
- a) Lealtad explícita.
1. ¿Qué es la lealtad explícita con Dios? Se trata aquí de cumplir la palabra dada a Dios. En cosas pequeñas como llevar a cabo un propósito sencillo. O en temas de mayor importancia como la fe o la vocación. En este último caso, uno se ha comprometido a dedicar su vida al servicio divino y es leal cuando mantiene su palabra.
- b) Lealtad sobreentendida o implícita.
2. ¿Qué es la lealtad implícita con Dios? Esta lealtad con Dios abarca los deberes que tenemos con Él por el hecho de ser hombres o cristianos, aunque no haya habido un compromiso verbal previo. Por ejemplo, hemos de cumplir los mandamientos, recibir los sacramentos, hacer apostolado, etc. Nuestro Señor nos ha otorgado la dignidad humana y cristiana, que reclaman un comportamiento adecuado.
3. ¿Esto es un fastidio? Esto no es un fastidio sino una consecuencia que acompaña a un gran don. Como quien recibe en herencia grandes riquezas adquiriendo la responsabilidad de administrarlas bien. Por ejemplo, uno reconoce el gran don de la filiación divina y afirma: quiero vivir como un hijo de Dios; quiero ser leal a mi Padre.
4. ¿Y si hay varias lealtades que se oponen? Suelen ser casos difíciles de resolver, donde habrá que dar prioridad a la lealtad más importante.
5. ¿Por ejemplo? Si uno se compromete a hacer algo malo, lo correcto es no hacerlo. En este caso están en juego tres lealtades: la fidelidad a la palabra dada a alguien, la coherencia implícita con uno mismo que incluye la regla de hacer el bien y evitar el mal. Y finalmente la lealtad implícita con Dios que ordena cumplir los mandamientos. Está claro que la fidelidad con Dios está por encima de compromisos humanos, y esa mala acción debe evitarse.
4. Una cita.- El 26.I.79, Juan Pablo II dijo unas palabras sobre la lealtad que merece la pena recordar: "Toda fidelidad debe pasar por la prueba más exigente: la de la duración (...) Es fácil ser coherente por un día o algunos días. Difícil e importante es ser coherente toda la vida. Es fácil ser coherente a la hora de la exaltación, difícil serlo a la hora de la tribulación. Y sólo puede llamarse fidelidad a una coherencia que dura a lo largo de toda la vida".
(www.ideasrapidas.org)



miércoles, 30 de enero de 2019

Palabras con mala prensa


Palabras con mala prensa

Aguantar: significado según el Diccionario

Sostener o sujetar el peso de algo o alguien.

Soportar o tolerar una cosa que resulta poco o nada agradable, una situación adversa, una condición climática, etc.

Soportar la compañía de determinada persona.

Resistir con fortaleza ante algo que implica esfuerzo, sacrificio o sufrimiento: "es admirable cómo aguanta el dolor sin una sola queja”…

El título de esta nueva sección que me propongo abrir en el blog “Parada y fondo”, se debe a la observación de la vida misma; cada día salta más a la vista lo poco que nadie está dispuesto a aguantar algo que le contraría y por el contrario, lo obligados que estamos todos a soportar, a  aguantar lo que no queremos; diría que es el peaje que tenemos que pagar por el hecho de vivir. Es completamente imposible pasar por la vida y que todo te vaya bien, por lo tanto doy una sugerencia: quizás lo que hay que hacer es buscar una razón superior por la cual no nos limitemos a “aguantar” sino a aceptar y llevar lo que tenemos lo mejor posible.

Ayer, leía en un determinado periódico una entrevista a un escritor que hace un tiempo había perdido a su mujer, le preguntaba el periodista si él pensaba que con fe era más fácil aceptar ese trance, reconozco que su respuesta me hizo gracia por lo absurdo, decía que “bueno, yo veo que a las personas con fe también les cuesta”; la fe –añado yo- no es una especie de coraza que te aísla de lo costoso, repito, el ser persona conlleva dolores y alegrías con fe y sin ella; el matiz que separa a la persona con fe de la que no la tiene, a mi juicio, se llama esperanza y eso es lo que realmente ayuda a llevar mejor las situaciones costosas, pero repito, lo costoso es costoso para todos y hay que saber aguantar.



viernes, 25 de enero de 2019

Sobre la mujer. Interesante y real.


La mujer está llamada a desempeñar en la sociedad y en la Iglesia un papel tan relevante como el del hombre. Y digo “está llamada” porque, por desgracia todavía se suele reducir la presencia de la mujer al ámbito de lo privado, con escasa participación en tareas de responsabilidad pública.

Son pocas las mujeres que actúan en los mundos de la política, de la economía, de las relaciones internacionales; y siguen siendo los hombres los principales configuradores de nuestra sociedad. Pero los cambios en este terreno se están produciendo a gran velocidad, y en una medida sin precedentes en la historia.

El papel de la mujer está definido, en mi opinión, por dos elementos: su identidad y su autodeterminación. La mujer –como el hombre- tiene que estar en condiciones de orientar con autonomía su futuro, su proyecto vital. Para lograrlo ha de disponer de las mismas oportunidades que el varón. Y lo hará desde su identidad, siendo quien es, sin caer en la tentación del mimetismo, sin imitar las costumbres y ademanes del varón pensando que así se encontrará sí misma.

La mujer está reclamando, a veces en silencio, no discursos, promesas, adulaciones, sino hechos que confirmen las tan cacareadas buenas intenciones. Es decir, está reclamando dejar de ser un “tema”, un motivo de conferencias internacionales, un incómodo sector a quien se asigna –como una concesión- una cuota de poder. La mujer es, sencillamente,  una persona más, destinada a construir junto con el hombre la sociedad que junto con el hombre forma, con iguales derechos y oportunidades.

(Javier Echevarría. “Instantáneas de un cambio”. Ed. Palabra)

domingo, 13 de enero de 2019

Leelo entero


Conclusiones:

1. Para conseguir las cosas hay que esforzarse.
2. La felicidad no está en tener cosas, está en luchar por conseguir objetivos.
3. Si los objetivos se consiguen sin esfuerzo, no nos llenan.

viernes, 4 de enero de 2019

Buenos consejos


EVITEMOS  LAS EMOCIONES TOXICAS

Una persona realmente inteligente limpia sin cesar su espíritu y mente. De hecho, tú, cada día dedicas un momento al aseo corporal y material, ¿pero cuánto tiempo consagras a limpiar tu mente y tu alma?

Una ley espiritual asegura que el pensamiento determina nuestro comportamiento.

Tu alma y mente están condicionadas por un sistema de emociones y creencias que te conviene reprogramar. Según la ley de atracción, llamas a tu vida lo que crees y piensas.

Si tus creencias y emociones son negativas, a tu vida llegará lo oscuro, porque eso es lo que atraes, pero si son de amor y satisfacción, tu mente, alma y vida se llenarán de luz y paz.

Elige limpiar tu alma de todo lo que la contamina.

La desconfianza, el miedo, el rencor, la culpa, la infravaloración y el orgullo, son basura.

En especial, necesitas ser muy cuidadoso con estas siete emociones tóxicas:

ODIO
CULPA
MIEDO
RABIA
TRISTEZA
CELOS
ENVIDIA.

Busca por todos los medios que lo exterior, por más horrible que parezca, no afecte tu mundo interior. Eso es lo que logra el sabio y, por eso, permanece imperturbable cuando todos se alteran.

Una gran ayuda para estar armonizado y tener buenas emociones es regalarte pausas refrescantes para relajarte, orar y meditar.

Puedes hacerlo en silencio o con música serena; también, visualizando algo hermoso o enfocado en tu respiración pausada.

Hay muchas formas de meditar, y una de ellas es hacer muy bien lo que estás haciendo, sin distracciones.

Vive lo que haces cuando comes, caminas, lees o te bañas. Haz eso y nada más que eso. Hagas lo que hagas, hazlo totalmente, inmerso en lo que vives y apartado de todo lo demás

Entonces, no es raro que, de pronto, te sientas como flotando, en un estado sereno de fluir como el agua.

Parece raro, pero pocas personas logran hacer algo con toda el alma, porque su mente anda errática.

Mientras comen o se bañan ella está en otro lugar, y necesitan aquietarse y controlar a la ‘loca de la casa’.

Por eso dijo un sabio: “cuando te sientes, siéntate;  cuando camines, camina; cuando ores, ora”.

Aprende a respirar, huye del ruido y el acelere, y vive lo que haces en un estado de meditación serena y sin temores.

Al violento y el envidioso casi siempre un gran miedo los  apresa, devora y desequilibra. Ese miedo, en buena medida, nace de una gran inseguridad y serios vacíos emocionales.

El agresor infunde temor, quiere mostrar una fuerza que no tiene, y atacando, camufla su debilidad y fantasmas internos.

El miedo es el motor de muchas reacciones dañinas: agresión, ira, engaño, envidia, celos.

¿Cómo amansar el temor? Reconociéndolo, afrontándolo, amándose y buscando la paz interior.

Cuando un agresor recibe amor se desarma, ya que no hay antídoto más poderoso que el amor puro.

Haz todo con amor y verás como las tempestades se calman y los espíritus se desarman.

(Gonzalo Gallo G. Escritor y Conferenciante)




martes, 1 de enero de 2019

Empieza el Año

Pues sí, ya ha empezado el Año 2019 y como siempre abre nuevas expectativas, la forma de no vernos defraudados es seguir el consejo de Mafalda y si se está de acuerdo las orientaciones que he encontrado en Internet.