Opiniones personales. Opiniones ajenas. Mafalda. Otros

jueves, 15 de noviembre de 2018

Después de un largo silencio...

Soy consciente que he pasado 15  días sin decir ni "mu", lo cual es normal porque no soy una vaca, bromas aparte, quiero reincorporarme con un artículo de la página web "religión en libertad que me parece muy interesante y animo a leerlo. Un saludo


Las 4 preguntas para saber si en casa tenemos obesidad digital... y cómo desconectar para ganar vida
¿Usas Internet? Eso es como preguntar “¿usas electricidad?” Pero ¿usas demasiado Internet? Quizá es Internet la que te usa a ti y luego te deja tirado, quizá arrastrándote a la cama agotado a hora intempestivas, sin capacidad ni para tratar con su familia.

Me desconecto, luego existo
(Editorial Encuentro) es un libro ágil, directo, de 127 páginas, que busca responder a nuestras preguntas sobre cuál debería ser el uso moderado, sano, adecuado de Internet, las pantallas y las redes sociales.

Isidro Catela, doctor en Ciencias de la Información,
profesor de Comunicación en la Universidad Francisco de Vitoria y padre de 3 hijos, aborda el tema a partir del concepto de “obesos digitales”: igual que hay quien abusa de la comida, y le perjudica a la salud, también hay quien abusa de las pantallas. Como en otras adicciones, en las primeras fases podemos tender a negarlo, pero si interfiere en nuestra vida es motivo para preocuparnos. Hay 4 preguntas que sirven de termómetro para medir si estamos mal:
1) ¿Alguna vez experimentaste el impulso o urgencia de sacar el móvil mientras estabas hablando de un tema importante con otra persona?

2) ¿Alguna vez te ha dado la sensación de que algo (una fiesta, encuentro, cita) no te había sucedido de verdad hasta que conseguías colocarlo en las redes sociales?

3) ¿El parpadeo de la luz del móvil o las notificaciones del whatsapp han llegado a acelerar tus pulsaciones?

4) ¿Te has sorprendido pasando mucho tiempo en silencio con tus seres queridos mientras cada uno estaba inmerso en su universo digital?
Quien cumpla estos 4 criterios, probablemente ya puede considerarse un obeso digital y debería ponerse a régimen, cuidar su dieta.
"Estamos cortando relaciones humanas"
“Pensemos en nuestras conversaciones con nuestro cónyuge, en cuántos temas serios hemos ‘wasapeado’ pero sin llegar a hablarlos en persona, en profundidad. Tampoco llamamos ya a los amigos para felicitarlos, les mandamos un mensaje. Estamos cortando relaciones humanas”, señala Catela.

El síntoma del corazón que se acelera ante las notificaciones es na reacción psicofísica importante, un indicio que muestra el nivel al que puede afectarnos.

“Es paradójico que una herramienta maravillosa que nos acerca a los que están lejos nos esté también alejando de los que tenemos a nuestro lado”, advierte Catela. “Si estás con tu esposa o amigos y cada uno está inmerso en su pantalla estáis perdiendo conversación personal, profunda, cara a cara”.
Un primer paso que recomienda Catela es pararse y reconocer el nivel de dependencia que se tiene. Lo primero, contar las horas reales que se dedican a las pantallas, que no son de verdad necesarias y que nos hacen perder la posibilidad de hacer muchas otras cosas, desde pasear, a leer libros, a hablar con seres queridos. Hay un criterio clásico: cuando abandonas o desatiendes en serio tus obligaciones como estudiante, o padre de familia o profesional, por esas distracciones, cuando interfieren mal en tu vida, es adicción.
Para desintoxicarse: apagar, usar programas especiales
Después de tener el diagnóstico, es necesaria la desintoxicación. “Más que grandes terapias, en la mayoría de casos basta con cambiar nuestras rutinas diarias. Por ejemplo, estar un fin de semana sin pantallas. O apagarlas a ciertas horas. O establecer un par de momentos para atender el correo electrónico”. También hay aplicaciones y herramientas profesionales para mejorar el control, y el libro comenta algunas y las describe.
En el libro, Isidro Catela recoge algunos casos de “ermitaños” o “exiliados” digitales: aquellos que han decidido dejar por completo o casi por completo la conexión a Internet y redes sociales. Otros lo hacen para recordar como se vive “desconectado” y una vez desintoxicados vuelven a las redes con hábitos mucho más sanos y más autocontrol. Por eso, el libro se titula “Me desconecto, luego existo”.
“Tenemos que recuperar las experiencias reales: menos jugar a vídeojuegos de fútbol, y más jugar a fútbol de verdad, aunque sea con tus hijos”, recomienda a modo de ejemplo.
Ya casi nadie lo niega: hay adicción digital
Hace pocos años aún se negaba que existiesen adicciones digitales, a las pantallas y las redes. Hoy ya casi nadie lo niega: las evidencia son abundantes y el libro las repasa para refutar a escépticos.
“Este año, en 2018, se ha abierto por primera vez en Madrid un centro de terapias que habla directamente de tratar la adicción digital en adolescentes”, constata el autor. “Antes solo se hablaba de adicción a los vídeojuegos, pero las redes sociales pueden funcionar igual a nivel adictivo”.
Los más vulnerables son los niños y adolescentes, “aunque hoy parece que la adolescencia y su inmadurez se alarguen hasta los 40 años a veces”. Los universitarios han nacido ya con móvil, no conciben dejarlo. El móvil, siempre accesible en el bolsillo, puede ser puerta de entrada para otras adicciones, a las apuestas on line, a la pornografía, etc… Las apuestas on line, por ejemplo, que también son adictivas para muchas personas, te tientan en el móvil a cualquier hora pero además son potenciadas por la televisión, la prensa generalista, los clubes deportivos, etc… precisamente cuando el deporte es un ámbito de gran influencia en los jóvenes.

El libro habla del caso de los hikikomori, los jóvenes y adolescentes japoneses que se encierran en su cuarto y no salen ni se relacionan con el resto del mundo excepto por Internet. Sus padres (o empresas de comida a domicilio) les traen la comida. Se calcula que son unos 2 millones de personas en Japón. Se te considera hikikomori cuando cumples más de 6 meses de reclusión voluntaria. “Son como los prisioneros o esclavos de la caverna de Platón: no ven la vida, sino las sombras, las imágenes de la vida en las pantallas”.
“En España probablemente no lleguen ni a 2.000 las personas en una situación similar, pero existen y eso ya es muy preocupante”, advierte Catela.
Como los magnates de droga: no la dan a sus hijos
“Lo curioso es que los grandes empresarios y gurús de las empresas tecnológicas no dejan a sus hijos tener móvil, les regalan libros de papel, los llevan a bibliotecas todo el día, les hacen pasear, no les compran tablet. Si la mercancía es tan buena, ¿por qué no la venden a sus hijos? Recuerda a los grandes vendedores de droga, cuya primera norma para el negocio es nunca consumirla”.
Catela cree que hay que poder “integrar equilibradamente las grandes ventajas que nos aporta el mundo conectado, sin demonizar la tecnología, pero volviendo a poner en el centro a las personas”.
El efecto nocivo en los estudios y escuelas
“En el libro cuento cómo el más reciente estudio en Estados Unidos sobre el tema es pedía algo tan revolucionario como volver a coger los apuntes con bolígrafo y papel. Lo de exhibir un powerpoint o dejarlo colgado en Internet no es tan eficaz para enseñar”.

Parte del perjuicio a los estudios tiene que ver simplemente con dormir menos: hay tantas teleseries, tantas cosas interesantes, tantas notificaciones en redes a altas horas de la noche, que se duerme poco y luego en clase se rinde poco.
Niños de 9 años logran conectarse a juegos online con amigos durante largas horas nocturnas: eso no es bueno en absoluto. “Son auténticas luciérnagas, puedes ver que los compañeros de clase de tu hijo están conectados a las cuatro o cinco de la madrugada. Quizá lo hacen también sus papás, o quizá, simplemente, no hay ningún control en casa, y duermen con el móvil bajo la almohada”.
Como profesor universitario, le consta que hay gran cantidad de alumnos que estudian Humanidades o Periodismo y no han leído un libro entero en su vida. Han pasado su escasa vida "lectora" trabajando sólo con resúmenes o fragmentos bajados de Internet. “Se creen buscadores de información porque toman las tres primeras entradas que encuentren en Google, que son las promocionadas, no necesariamente las relevantes al tema. Después hacen corta y pega y les parece que eso ya es un trabajo".
Si les pido un trabajo sobre, digamos, Cáritas, no irán a Cáritas ni hablarán con los trabajadores, o responsables ni el encargado de prensa: se limitarán a copiar lo que encuentren en su web y alguna más”, lamenta el profesor.
En una época en que deberíamos impulsar a los jóvenes a tener experiencias “fuera” de la pantalla, hay colegios que insisten en usar pantallas en clase, y en encargar deberes para casa que usan las pantallas… los arrojan, de nuevo, a ese ámbito único que todo lo absorbe.
“O volvemos pronto al equilibrio, como sociedad, familia y educadores, o las familias tendremos que organizarnos como sea, quizá en pequeñas islas de comunidades creativas para establecer un uso razonable de la tecnología en la educación y en la vida”.
Me desconecto, luego existo" es ágil, interesante, muy actualizado y bien documentado: puede adquirirse en librerías o aquí en Ediciones Encuentro.

sábado, 27 de octubre de 2018

Una historia real


Una de las causas que explican el fracaso de tantos matrimonios -no la única-, es la distorsión del significado de la palabra “amor”. No pienso disertar, solo voy a contar un hecho real y cada uno que saque sus consecuencias.

Hace ocho años a una amiga mía le diagnosticaron una rara enfermedad neurológica y degenerativa, los médicos no sabían bien cómo iba a evolucionar y mucho menos cómo podían atajarla. Desconcierto para ella, para su marido e hijos, amistades, etc. Empezó entonces ocho largos años de pruebas buscando que era lo mejor para ella, ¿ingresarla en alguna residencia en donde pudiera tener un trato más especializado?, se hizo la prueba, en la primera que estuvo sólo admitían a ella, no al marido, así que se decidió su traslado a otra porque su marido quería estar con ella; aquello tampoco dio resultado, como consecuencia de esa cruel enfermedad perdió la capacidad de hablar, entendía todo, nos conocía pero no se podía expresar.

El marido decidió que se volvían a su casa y allí mi amiga se vio que estaba mejor, al menos más tranquila; el marido ha estado con ella mañana, tarde y noche, la ha atendido en todas sus necesidades, si quería tomar una cerveza, se la tomaba sentado a su lado, manifestando una entrega y dedicación encomiable, adivinaba lo que mi amiga podía necesitar o le hacía ilusión. Ocho años con la misma actitud hasta que mi amiga ha muerto.

En esa relación ha habido lo que es el verdadero amor, se ha llevado a la práctica lo que la iglesia dice a los que se casan: “en la salud y en la enfermedad…”. Y su marido dentro del dolor lógico, pidiéndole a Dios que durase porque la necesitaba tener a su lado y también decía que su cariño hacia ella había aumentado precisamente en los años que ha durado la enfermedad.

Por eso me indigna que se pretenda desdibujar lo que une de verdad al matrimonio confundiéndolo adrede con la "chispa de la ilusión", "atracción física" o como se le quiera llamar.

Dejémonos de patrañas que no dan ningún buen resultado y vamos a la realidad, a lo que nos perfecciona como personas. Ese hombre ha sido feliz cuidando a su mujer, precisamente porque la quería de verdad.

viernes, 19 de octubre de 2018

Relativismo


Relativismo - Glosario de filosofía. Con el término relativismo nos referimos, en general, a toda posición filosófica que niega la existencia de verdades absolutas, ya sea en el   del conocimiento, de la moral o de la metafísica.
Relativismo Moral - ¿Qué es?
El relativismo moral  es la  idea de  que las opiniones morales o éticas, las cuales  pueden  variar de  persona  a  persona, son  igualmente  válidas y ninguna  opinión  de "lo bueno y lo malo" es realmente mejor que otra. El relativismo   moral   es   una   forma   aplicada   más  ampliamente,  más personalmente,  de otros  tipos de  pensamiento relativista, tales como el relativismo  cultural.  Todos  estos  están  basados  en  la  idea de que no existe ningún  estándar  definitivo  del  bien y  del mal, así que cualquier juicio  acerca del  bien  y  del  mal  es  puramente  un  producto  de   las preferencias  y entorno de la  persona. No existe un estándar supremo de moralidad, de acuerdo  con  el  relativismo  moral,  y  ninguna  opinión o posición puede ser considerada "correcta o incorrecta," "mejor o peor."

El relativismo moral  es una  posición ampliamente sostenida en el mundo moderno, aunque es aplicada muy selectivamente. Como con otras formas de relativismo,  se   menciona   solamente   de   una  manera  puramente defensiva.  Los principios  de  relativismo moral sólo pueden ser utilizados para excusar o permitir ciertas acciones, nunca pueden ser utilizados para condenarlas. El relativismo moral toma diferentes formas, desde utilitarismo, evolucionismo  y   existencialismo,   hasta   emotivismo     y situacionismo. Todos  estos,  en  su  mayoría,  comparten  un único tema unificador:  que no existe la moral absoluta, y que lo que es "correcto" o "incorrecto" es enteramente un producto de la preferencia humana.


Relativismo Moral - ¿Existe un estándar fijo?

Resulta  fácil  ver  que  las  bases  de  la  civilización  moderna no fueron construidas  sobre  una  filosofía  de relativismo moral. El mismo acto de aprobar una ley y de hacerlas cumplir sugiere un estándar fijo al que todo el mundo debe  adherirse. Las  razones  para  esto son obvias: si todo el mundo en  una  sociedad actúa verdaderamente como si el bien y el mal fueran puramente una cuestión de opinión, entonces la sociedad estallaría en  una batalla  de  "el  poder  da  la  razón." En una cultura moralmente relativista la única razón universal de hacer (o no hacer) algo es evadir las consecuencias de nuestros compañeros.

Todas  las  leyes  humanas  involucran  algunos  principios  que  se hacen cumplir por amenazas o consecuencias. Los límites de  velocidad se hacen cumplir en la mayoría de las carreteras, debido a una convicción moral de que arriesgar  las  vidas  de  otras  personas  es  incorrecto. Lo mismo es cierto para los  asesinatos,  robos,  perjurios, fraudes, etc. Sin embargo, cuando el relativismo moral se vuelve dominante, los principios morales legítimos  no  son ya  las  bases  de esas leyes. Ya que todo es relativo, entonces estas  leyes son sólo una cuestión de opinión, y la única razón universal  para  seguirlas  es evadir  las  consecuencias.  Esto  exhorta poderosamente a las personas a buscar formas de "salirse con la suya"; después de todo, es sólo la opinión de uno en contra de alguien más.

Hasta en una sociedad que opera bajo las leyes, cortar la conexión entre esas leyes  y  un  estándar  objetivo invita al desastre. Como mucho, el relativismo moral hace a  la sociedad inestable, ya que los conceptos del bien  y  del  mal de pronto  se convierten en una cuestión de cambiar la opinión popular. El peor resultado posible de tal condición es el dictador: un gobernante  que  abusa  de un cambio temporal en la opinión popular para obtener el control, pero no reconoce ninguna autoridad superior a la suya,  y  ninguna  ley  más vinculante que la suya. Durante los juicios de Nuremberg,  después  de la  Segunda Guerra Mundial, el problema lógico del    relativismo    se   hizo   aparente.   Los defensores   de    los  nazis continuamente   pedían   su   exoneración, alegando que  sólo  estaban cumpliendo las leyes de su país. Finalmente, un juez preguntó frustrado: "pero,  ¿no  hay  una  ley  superior  a  nuestra ley?"  Un relativista moral estaría obligado a contestar "no."


Relativismo Moral - Una Conclusión

El relativismo en sí es autodestructivo. Lógicamente, debe existir algún estándar con el cual comparar dos afirmaciones morales diferentes para determinar  cuál es  la  "correcta." Obviamente, los relativistas morales niegan  la  existencia  de tal  estándar,  y   por   ello  alegan  que  tales comparaciones son imposibles. Esto ocasiona el  problema práctico más grande  del  relativismo,  como  se mencionó   arriba:   es  difícil,  si no imposible, condenar cualquier acción desde una posición de  relativismo moral.

En  el  mejor  de  los  casos, una vez que lo correcto y lo incorrecto son relegados  a  cuestiones  de opinión, o son puramente subjetivos, en el mejor de  los  casos,  cualquier  conversación  de  moralidad se vuelve incoherente.



miércoles, 17 de octubre de 2018

Tan de moda hoy

EL AGNOSTICISMO
1. ¿Qué es el agnosticismo? El agnosticismo es una teoría filosófica que considera inaccesible al conocimiento humano lo que no pueda captarse por los sentidos. Renuncia a buscar la verdad fuera del campo de lo sensible. En especial, el agnosticismo renuncia a buscar a Dios.
2. ¿Para los agnósticos, Dios existe? El agnosticismo no se pronuncia respecto a la existencia de Dios. No dice que exista, ni que no exista. Sin embargo, en la práctica los agnósticos viven como si Dios no existiera.
3. ¿El agnosticismo es sólo una teoría? Aparentemente el agnosticismo es sólo una teoría, pero en la realidad tiene consecuencias prácticas importantes. En la práctica es un ateísmo.
4. ¿El agnosticismo es científico? Las ciencias positivas (ver positivismo) sólo admiten lo que se puede captar por los sentidos. Bajo este aspecto, el agnosticismo tiene aires de científico. Pero la realidad es más amplia que lo medible. Por ejemplo, usted decidió leer este artículo, y ningún aparato científico es capaz de detectar su pensamiento; sin embargo, su inteligencia y voluntad existen realmente, aunque no se vean. Igualmente, el sentimiento de odio no es detectable por aparatos, pero es tan real que causa guerras. Reducir lo razonable a lo medible es una limitación de la razón.
5. ¿Se puede conocer la existencia de Dios? Dios es un ser espiritual, y por tanto los agnósticos aciertan en que no se le puede ver ni tocar. Sin embargo, la existencia de Dios se puede conocer observando las obras divinas. Analizando la creación, se descubre al Creador, del mismo modo que viendo las pirámides se habla del pueblo egipcio.
6. ¿Ejemplos?: ¿Quién ha organizado el sol, la luna, la ley de la gravedad?, ¿Quién ha diseñado el dedo con que usted hace clic en el ratón? Estas cosas tan bien pensadas es imposible -verdaderamente imposible- que surjan por casualidad. Si se encuentra un bolígrafo en un planeta, nadie piensa que ha salido sólo; inmediatamente será noticia la existencia de seres racionales en ese planeta. Si se ve un ser humano, es razonable aceptar la existencia de su Creador. No somos dioses sino criaturas. (Ver evolucionismo).
7. ¿Podemos conocer a Dios? Los agnósticos aciertan en que el entendimiento humano es limitado y nunca podremos conocer por completo a Dios. (Ni a las mujeres, dirá un amigo; ni a los hombres, responderá otro). Sin embargo, sí es posible saber algo respecto a Dios, de varios modos:
  • Empleando únicamente la razón, podemos conocer que Dios existe, que hay un único Dios, que es eterno, bueno, inteligente, creador del mundo, etc. Cualquier perfección de las criaturas procede del Creador y se encuentra al máximo en Él.
  • A esto se añade lo que sabemos porque Dios mismo nos ha manifestado, principalmente con las enseñanzas de Jesucristo. Y lo que el Señor muestra a los hombres en los ratos de oración.
  • Finalmente, en el cielo se otorgará una gracia especial para que podamos conocer más íntimamente a Dios.

(www.ideasrapidas.org)

domingo, 14 de octubre de 2018

sábado, 13 de octubre de 2018

Otra reflexión sobre la felicidad

Disiento de Marco Aurelio pero la felicidad es algo más; lo que él dice yo lo pondría como ingrediente de la felicidad, saber disfrutar de lo que se tiene. Tener una visión positiva de uno mismo y de los demás. Desde luego la dependencia ansiosa es un obstáculo para la felicidad y quiero llamar la atención que en nuestro s.XXI y en nuestra sociedad actual esa actitud está a la orden del día. Quizás por eso hay tanta gente infeliz. 

Recapacitemos, aprendamos y rectifiquemos, es mi deseo para todos.

jueves, 11 de octubre de 2018

Reflexiones sobre la felicidad


Está claro no?, pues tengo para mi que no nos acabamos de convencer y con mucha frecuencia la ponemos en cosas que hoy son pero que mañana han pasado, viajes, éxitos profesionales, amoríos... y un largo etcétera. Ya lo dijo San Juan Pablo II, el hombre es importante no por lo que tiene, sino por lo que es.
Invito a los lectores a descubrir lo que cada uno es.

martes, 9 de octubre de 2018

El saber no ocupa lugar

EL LAICISMO
·         A. ¿Qué es el laicismo?
·         B. El laicismo y la religión.

A. ¿QUÉ ES EL LAICISMO?

1. ¿Qué es el laicismo? El laicismo es una teoría religioso-política que persigue eliminar a Dios de la sociedad, estableciendo un sistema ético ajeno a Dios. En su aspecto religioso es un ateísmo práctico que se impone a la sociedad con medidas políticas.
2. ¿Ateos o indiferentes? El laicismo adopta la postura de una indiferencia teórica. Pero en la práctica exige actuar como si Dios no existiera. También puede decirse que el laicismo es un ateísmo social porque pretende organizar una sociedad sin Dios (ateo significa sin Dios).
3. ¿En qué se basa el laicismo? Para instaurar sus planteamientos, el laicismo se basa en dos ideas correctas pero mal entendidas: la separación Iglesia-Estado y la libertad religiosa.
4. ¿Es buena la libertad religiosa? Sí; cada uno debe tener libertad para ejercitar la religión que desee, dentro de los límites del bien común. No se debe imponer una religión (ni un ateísmo).
5. ¿Es bueno separar religión y política? Depende cómo se interprete esto. Sobre todo depende qué se entienda por religión.
  • Si con esa separación se expresa que los curas no sean políticos, y los gobernantes no sean obispos, entonces la frase es correcta. Cada uno gobierne en su terreno.
  • Si con esas palabras se afirma que una religión no debe exigirse a todos, sino que se deben respetar las conciencias, entonces la separación es acertada. (Por esto el laicismo no debe imponerse a todos).
  • Si por religión se entiende a Dios, los actos de culto o las enseñanzas espirituales, entonces no es bueno separar la sociedad de Dios.
  • Si con esta separación se expresa enfrentamiento, tampoco es conveniente pues lo ideal es que Iglesias y Estados trabajen cada uno en su ámbito ayudándose en conseguir el bien de los ciudadanos.
6. ¿Y la laicidad del Estado? (Preguntan desde Chile). La laicidad del Estado es distinta del laicismo. La laicidad propone que el Estado no debe estar ligado a una religión particular sino que debe respetar la libertad religiosa. Sostiene que debe haber una separación adecuada entre Iglesia y Estado y no perjudicar a los ciudadanos por motivos religiosos. Es correcto.
En cambio en el laicismo, el Estado impulsa el ateísmo optando por la religión atea.
B. EL LAICISMO Y LA RELIGIÓN
1. ¿Qué defiende el laicismo ante la religión? El laicismo desea instaurar varios planteamientos:
  • Para el laicismo, el Estado debe apoyarse en una base común sin Dios. El laicismo reclama un Estado confesionalmente ateo.
    - Sin embargo, el ateísmo es una postura religiosa que tampoco debe imponerse.
  • El laicismo intenta relegar la religión al ámbito privado, prohibiendo las manifestaciones públicas de fe.
    - Sin embargo, una persona coherente vive de acuerdo con sus creencias tanto en privado como en la vida social. No se debe obligar al creyente a que se comporte como un ateo. (Tampoco se debe forzar al ateo a que actúe como religioso).
  • El laicismo y el relativismo suelen ir unidos, pues ambos defienden el indiferentismo religioso.
    - Hay varias religiones pero esto no significa que sean falsas, o que sea indiferente elegir una. Por ejemplo, puede haber varias teorías sobre un hecho histórico, pero sólo un suceso tuvo lugar realmente. Habrá que buscar la religión verdadera.
2. ¿Ejemplos de actitudes laicistas?
  • El laicismo suprimirá las clases de religión, las fiestas e imágenes religiosas, asentando su ateísmo con excusa de respeto a otras religiones.
    - Respetarlas sería añadir imágenes y clases de las religiones que lo soliciten razonablemente. Quitar todas es imponer la religión atea.
  • Especialmente, el laicismo rechaza cualquier idea que suene a católica.
    - Sin embargo, el que una idea sea católica no la hace falsa. Por ejemplo, la razonable idea de prohibir el robo.
3. ¿Hay un marco de gobierno común? El laicismo intenta que la base ética del Estado sea el ateísmo, pero esto es una postura que tampoco debe ser obligatoria. Entonces, ¿qué es lo común a todos los hombres? Precisamente el hecho de ser hombres. Por esto, las reglas éticas del Estado deberán basarse en lo propio de la naturaleza humana, en la llamada ley natural. (El ateísmo es la menos natural de las posturas religiosas). Con otras palabras: la base está en la dignidad de la persona humana.
4. ¿Se conocen las normas de la ley natural? El documento más conocido que contiene un resumen de la ley natural son los diez mandamientos. En su origen son formulaciones judeo-cristianas, pero ya se han convertido en patrimonio de la humanidad.
5. ¿Hay mandamientos laicistas? El laicismo no tiene reglas morales ni mandamientos, salvo apartar a Dios sobre todas las cosas.
- Al quitar a Dios es difícil mantener unas reglas de conducta. Puedes matar y robar mientras no te pillen. Usa del sexo como te dé la gana. Miente lo que te convenga. Por esto, en las sociedades donde el laicismo se extiende, aumentan la delincuencia y la corrupción.
6. ¿No hay ateos buenos? Hablamos del laicismo en general. En cambio, hay casos particulares de personas ateas que se comportan bastante bien -excepto con Dios, lógicamente-.



lunes, 1 de octubre de 2018

El saber no ocupa lugar

EL FIN DEL MUNDO
1. ¿Cuándo será el fin del mundo? No se sabe con certeza. Sólo se conocen algunas señales no muy claras que anticipan el final:
  • Se predicará el evangelio en todo el mundo. (Pero se ignora hasta qué punto).
  • Habrá una dura prueba para la Iglesia. (Siempre las ha habido, pero esta vez será especialmente grave).
  • Habrá caos en la naturaleza.
2. ¿Qué sucederá al fin del mundo? Se conocen varias cosas que sucederán:
  • Tendrá lugar la ruina del mundo actual que dará paso a un mundo nuevo.
  • Los cuerpos resucitarán para unirse de nuevo a sus almas (resurrección).
  • Jesucristo vendrá glorioso y tendrá lugar el juicio final.
3. ¿Cómo se sabe que sucederán estas cosas? Sólo Dios conoce cuando y cómo sucederá el fin del mundo. Nosotros sabemos lo que el Señor manifestó a sus Apóstoles y figura en la Biblia.
4. ¿Qué dice la Biblia? Hay varios textos que hablan del fin del mundo. Veamos unos ejemplos del evangelio de San Mateo (en San Marcos y San Lucas hay textos parecidos):
- No se sabe cuando sucederá y llegará de improviso (Mt 24, 36-41).
- "Se predicará este Evangelio del Reino en todo el mundo" (Mt 24, 14).
- Tribulaciones para la Iglesia (Mt 24, 3-26).
- Caos en la naturaleza (Mt 24, 29).
- Resurrección de los cuerpos (Mt 22, 31; 1Cor 15, 35-54).
- Vendrá Jesucristo glorioso y nos juzgará (Mt 25, 31-46).
5. ¿Y la conversión de los judíos? En Rom 11, 26-27 se habla de que llegará un momento futuro en que "todo Israel se salve", pero esta afirmación no va unida al fin del mundo. La conversión tendrá lugar, pero el fin de mundo puede ser muy posterior.

(De www.ideasrapidas.org)



viernes, 28 de septiembre de 2018

Otra historia interesante para el fin de semana


De «punki» y drogadicto que casi muere apaleado a padre de 9 hijos: un fin de semana cambió su vida.

Ricardo Pareja Meseguer es ahora marido, padre de nueve hijos y evangelizador digital. Su vida, como reconoce este catalán de casi 50 años, es un milagro. Sigue vivo por la gracia de Dios, pues antes de conocer la Iglesia era punk, con su estrafalaria estética y su cresta, estaba metido en el mundo de la droga y borracho todo el día en la calle. El empeño de su tía, que rezaba por él en todo momento, y una paliza que le propinaron unos neonazis en la que perdió la visión en un ojo, fueron el desencadenante que acabaron llevándole a Dios.
Unas catequesis del Camino Neocatecumenal lograron que de un día para otro dejara la vida punk, todos los vicios y arreglara las cosas con su familia. Ya estando en esta realidad eclesial conoció a la que hoy es su mujer, ella también entró en la Iglesia, y juntos crearon esta familia numerosa.
Vida punk, drogas y alcohol
Yo era uno de esos ‘punkies’ de mediados de los 80 que estaba metido en la droga, siempre borracho, iba con una cresta de gallo y encadenado con cadenas gruesas, no me lavaba, andaba con unos colegas donde el amor libre y la homosexualidad eran el ambiente dominante. Realmente estaba hecho un asco y nadie daba un céntimo por mi vida”, explica Ricardo.
Todo estalló cuando estudió en una academia de peluquería. Era una persona muy tímida y pasó una mala experiencia. “En esa situación –cuenta este barcelonés- conocí una chica punk y me fascinó ese mundo. Entrar en él era como salir de golpe de la timidez y echarle cara a todo y como no, para esta hazaña necesitaba la ayuda del alcohol y de las drogas”.
La paliza con la que casi le matan
Su vida se convirtió en una espiral de vicios y malas compañías. Su familia temía que cualquier día llegara una llamada diciéndoles que su hijo estaba muerto. Y esto estuvo  a punto de suceder. “Cuando peor estaba, el Señor, que ya había intentado atraerme con lazos de amor sin éxito, me hizo vivir una experiencia que cambió mi vida para siempre… Un día me cogieron un grupo de neonazis, me golpearon con barras de hierro en la cabeza hasta que todo yo era brechas de sangre. Me dejaron medio muerto en mitad de la vía pública mientras la gente deambulaba sin hacer ni decir nada”, recuerda.
Finalmente, una ambulancia le trasladó al hospital. Allí estuvo dos semanas ingresado y le dijeron que nunca más vería con uno de sus ojos.
La convivencia que cambió su vida
Poco antes de que le dieran el alta, su tía que siempre había rezado por él y le hablaba de Dios apareció con un matrimonio. Le invitaron a una convivencia. Y sin nada que perder acabó yendo.
En aquella convivencia quedó fascinado con las catequesis. En una entrevista en Misioneros Digitales explica que “muchas cosas me impactaron. Por ejemplo, descubrir que en las Escrituras estaba mi vida, que no eran solo historias que pasaron, sino que era totalmente actual para mí. Que Dios me amaba tal como yo era a pesar de que era despreciable, que me quería tanto que había muerto y resucitado por mis pecados. Que me esperaba una vida plena de la mano de Cristo, que yo me había pasado la vida buscando el sentido y el sentido era amar y esto no lo podía realizar yo, que es un don de Dios”.
Tras esta convivencia regresó a Barcelona y entró en una comunidad neocatecumenal de la parroquia de San Luis Gonzaga. Su vida dio un vuelco total, y entonces conoció a Merche, que no era creyente, y que acabó siendo su esposa y madre de sus nueve hijos. “El Señor nos permitió un noviazgo santo, ¡qué regalo! Era como un tesoro preciado para mí. El Señor me colmaba con creces… ¿merecía yo ese derroche de gracias? Sentía, sin duda, que no me lo merecía pero el Señor es infinitamente bondadoso. Tiempo después Merche entró a la Iglesia y nos casamos”.
La conversión es diaria
Ricardo recuerda el cambio radical de su vida, pero también las luchas enormes a lo largo de los años. “Después de mi conversión, de casarme con Merche, aunque ya nunca consumí drogas, sí bebía con asiduidad y eso me volvió a traer problemas”, confiesa. Ya han pasado 10 años sin abusar del alcohol. Pero también “he tenido mis crisis de fe, porque la conversión es diaria, aunque en esto, mi esposa ha sido un instrumento de Dios y una ayuda perfecta”.
Su vida tenía ya un orden. La relación con sus padres experimentó un cambio total. “Estaba recobrando la alegría perdida entre las falsas carcajadas de cuando estás colocado. Ya no necesitaba aparentar ni llamar la atención con una indumentaria. Podía estar limpio y perfumado, era un joven contento con su vida porque hasta lo más oscuro de mi vida pertenecía a mi historia de salvación”.
Sus hijos conocen su historia
Tampoco ha ocultado nunca a sus hijos cuál ha sido su pasado. Ricardo afirma que “siempre les he hablado con franqueza de mi historia” porque “la vida es un misterio de alegrías y sufrimientos, de vigor y enfermedad, de luchas y noches oscuras. Pero todo es historia de salvación”.
“Mis hijos –agrega este padre- me conocen, saben que muchas veces me equivoco, que a veces soy duro, cabezón, gritón y muchas más cosas, y aunque siempre hay un tiempo en la adolescencia en el que parece que yo soy como el enemigo, la verdad es que es un tiempo que pasa y a la luz de la fe ellos también descubren que lo que a su padre le pasa también en parte les pasa a ellos. Para nada somos perfectos, una familia tan numerosa la hace grande el Señor, porque nos reconciliamos, rezamos los unos por los otros y eso es lo más”.
El mundo necesita apóstoles
Ricado Pareja es consciente de la necesidad de Dios que hay en el mundo y por ello evangeliza también a través de Internet. A tiempo y a destiempo. En la entrevista explica que “los divorcios superan en muchos países a las bodas, los jóvenes han perdido el sentido del esfuerzo, la capacidad de sufrimiento, no saben lo que es el amor. Todo es sexo y libertinaje. No podemos estar impasibles a este terrorismo que nos sacude. Los ancianos nadie los quiere porque ya no producen sólo son un gasto y cuidarlos nos destruye. Estamos construyendo una sociedad individualista donde todo se realiza a través de una pantalla, sin el trato humano, sin que se puedan conocer personalmente al otro y amarlo. Donde sólo hay un dios que es el dinero. En nuestra mano está decir la verdad, y la verdad es que el que tiene el Espíritu de Jesucristo tiene un corazón dispuesto a amar. Esto es lo que esta sociedad necesita, porque si tú has experimentado que Cristo te ama, tú ya no abortas, ni metes a tus padres en el asilo, ni dejas a tu mujer por otra más joven. El problema está en el corazón y Dios es un renovador de corazones. Por eso, que mejor aprovechar estos medios que llegan a tanta gente”.