Opiniones personales. Opiniones ajenas. Mafalda. Otros

jueves, 14 de julio de 2016

Metas para el verano

Desde hace unos años y en muchos casos por exigencias de los horarios de trabajo, muchas personas se ven obligadas a comer fuera de su casa, privándose de un rato de convivir en familia y teniendo por tanto que renunciar a los beneficios que en la mayoría de los casos supone la convivencia.

El problema se agrava cuando en muchos hogares se sustituye también la cena por ir a la nevera y coger lo que me apetece para comerlo cuando quiero, a veces con la compañía de... un ordenador, móvil u otro artilugio similar y prescindiendo de las personas.

Estas costumbres que por desgracia se van extendiendo van en detrimento de la vida de familia y poco a poco, casi sin darnos cuenta se va imponiendo el individualismo con el consiguiente egoísmo y una reata más o menos grande de vicios que nos llevan al olvido de los demás.

Es fácil encontrar a personas de edades diversas, jóvenes y mayores que cuando están en su casa están nerviosas, mirando el reloj, con ganas de salir corriendo porque se "tensan". Me acuerdo de una idea del Papa Francisco, realista y actual, decía el Papa que las personas prefieren la compañía de un perro porque éste nunca le iba a llevar la contraria.

Cambio el perro por el móvil, iPad, ordenador, e incluso el mismo trabajo, etc. y en esas palabras del Papa encuentro una de las razones por la cual se huye de la vida familiar. Lo que nos tenemos que preguntar es hacia dónde.

Sugiero que en estos meses de verano aprovechemos para intensificar esa vida familiar, sin prisas en las comidas, desayunos, etc. de forma que volvamos a convivir, probablemente exigirá esfuerzo pero pienso que vale la pena.