Edith Stein nació en la ciudad alemana de Breslavia en el seno de una familia judía, en 1891. Era la última de un total de once hijos. Su progenitor era mayorista en la venta de maderas, negocio del que a su muerte, se ocuparía su viuda.
En 1916 ingresa a la Universidad de
Gotinga, donde estudió Germanística e Historia. Atraída por la fenomenología
trascendental, se convirtió en discípula del célebre filósofo Edmund Husserl. En Friburgo, en 1917, aprueban
'Summa Cum Laude' su tesis doctoral. Posterior a su tesis, vienen los escritos
"Causalidad Sentiente" e "Individuo y Comunidad", en donde
busca justificar filosóficamente la nueva psicología naciente.
Dentro de esta primera etapa en su pensamiento
filosófico, vale también la pena resaltar su obra "Introducción a la
Filosofía". Si bien no pertenece propiamente al ciclo de obras anterior y
es de difícil catalogación, es una obra sumamente original. A partir de la segunda parte (encargada de
estudiar la subjetividad), formulará una antropología propiamente dicha y
resaltará las características del hombre como la libertad, la conciencia, y la
capacidad reflexiva. En esta obra hablará de las estructuras de la personalidad
y empleará el escrito como preámbulo a una obra de su etapa posterior: "La
estructura de la persona humana", que es un curso que ella impartió en el
Instituto de Pedagogía Científica en Münster, Westfalia (1932/33).
En Gotinga, se acerca por primera vez al catolicismo y al estallar la Primera Guerra
Mundial, en 1915, conmovida por los desastres de la
guerra, Edith siguió un curso de auxiliar
de enfermería y trabajó en un hospital austríaco.
El hospital donde servía fue cerrado en 1916
y Edith reanudó sus estudios filosóficos con Husserl y obtiene el doctorado en
la Universidad
de Friburgo (Alemania).
Varios de los filósofos discípulos de Husserl se
convierten al catolicismo. En 1921, Edith visita la biblioteca y lee la
autobiografía de Santa Teresa de Ávila.
Según la propia Edith (que lo confesaría después), esta obra fue determinante
para su conversión definitiva al catolicismo. En
enero de 1922, Edith fue bautizada y el 2 de febrero del mismo año,
recibió la confirmación.
A partir de su conversión al catolicismo inicia una
nueva etapa en su pensamiento filosófico. Se dedicará al intenso estudio de las
obras de santo Tomás de Aquino
y del beato Duns Escoto.
Posteriormente escribirá "Ser Finito y Ser
eterno", su obra magna, en la que desarrollará toda una metafísica
inspirada en la filosofía de Santo Tomás y la fenomenología de Husserl,
resultando así, una de las últimas tomistas más originales de la historia de la
filosofía.
En 1933, después de dar cursos y
conferencias sobre el tema de la mujer y la pedagogía, ingresa al Convento de
las Carmelitas Descalzas
de Colonia, donde toma el hábito de dicha orden, con el nombre de Sor Teresa
Benedicta de La Cruz.
El 31 de diciembre de 1938 es enviada al Carmelo de Echt (Holanda). El 9 de junio de 1939, Edith Stein
escribe su testamento lo que, según Eduardo de la Hera, podría interpretarse
como un presentimiento de su muerte.
El 10 de mayo de 1940, las tropas de Hitler ocupan
Holanda, y el 14 del mismo mes capitulan los Países Bajos y Bélgica. Edith
escribe:
“Una
ciencia de la cruz solo se puede adquirir si se llega a experimentar a fondo la
cruz”.
El 13 de enero de 1941, los obispos holandeses
publican una carta pastoral en la que se muestran contrarios a que los
católicos pertenezcan al partido nazi. En el mes de noviembre redacta una de
sus obras más famosas, Ciencia de la cruz.
En abril de 1942, Edith y Rosa son «fichadas» por la Gestapo. Como represalia de los nazis, debida
a la misión pastoral de los obispos holandeses que luchan en contra de la
deportación de judíos, Edith Stein es arrestada el día 2 de agosto de 1942 por
la Gestapo junto a su hermana Rosa y llevada con otros religiosos y religiosas
al campo de concentración de Amersfoort, y dos días
más tarde al de Westerbork (Holanda).
Posteriormente es enviada al campo de exterminio
nazi de Auschwitz. La llevaron a la barraca 36, siendo
marcada con el Nº 44.074 de deportación. Murió como judía y mártir de la fe católica a los 51 años de
edad,
Mujer de singular inteligencia y cultura, ha dejado
numerosos escritos de elevada doctrina y de honda espiritualidad.
Teresa Benedicta de la Cruz fue beatificada por Juan
Pablo II en Colonia, el 1 de mayo de 1987. Su fiesta se celebra en el Carmelo
Teresiano y en la Iglesia Católica el 9 de agosto.
Pensamiento
“Quien busca la verdad, sea o no
consciente de ello busca a Dios”
“También tenemos que aprender
esto: ver a otros llevar su cruz y no poder retirársela”
“En el signo de la Cruz,
venceremos… se vean o no los frutos”
“Cuanto más oscuro se vuelve
aquí todo para nosotros, tanto o más tenemos que abrir el corazón a la luz que
viene de arriba”
“El Señor nos espera para acoger
nuestras cargas, para consolarnos, para aconsejarnos, para ayudarnos como el
más fiel y siempre amigo”
“una mujer fue la puerta a
través de la cual Dios entró en la humanidad”.
Interesante biografía, además tengo que reconocer que no conocía su vida. Gracias por acercarnos a su historia.
ResponderEliminarUn beso!!!
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