Tan oscurecida está la verdad en este tiempo y tan establecida
la mentira, que, a menos que se ame la verdad, no se sabrá reconocerla.
La gente maligna conoce la verdad, pero solo la
sostiene cuando coincide con su interés; fuera de eso, la abandona.
Aunque las personas no tengan ningún interés en lo que
dicen, no hay que concluir que absolutamente no mienten. Hay gente que miente
simplemente por mentir.
Una pequeña cosa consuela porque una pequeña cosa nos
aflige.
No hay comentarios:
Publicar un comentario