Sigo con otra reflexión
Opino que vivimos en un
tiempo de contradicciones. Somos capaces de diagnosticar lo que pasa a nuestro
alrededor a veces con bastante acierto, pero somos incapaces de mirarnos a
nosotros mismos para ver nuestra parte de culpa y rectificar.
Se confunde con
demasiada frecuencia el amor con la pasión y eso contribuye a hacer personas
incapaces de mantener relaciones estables porque se fundamentan en pasiones
cambiables y son arenas movedizas que no sirven para fundamentar nada serio.
Rectificar es de sabios
pero por desgracia pensamos que es de débiles y volvemos a lo de siempre, al
orgullo absurdo que levanta barreras, todo antes que admitir que nos hemos
equivocado.
Y nos aislamos y el resultado es el egoísmo, yo a lo mío y los
demás que se las apañen, pero ese egoísmo engendra tristeza, personas
desencantadas de la vida y volvemos a la “rueda”, la forma que se nos ocurre
para salir de ese estado es la búsqueda de emociones fuertes que al final dejan
hecho polvo y con sensación y realidad de fracaso.
Me acuerdo de la famosa
frase de Agustín de Hipona que había hecho un recorrido similar al que estoy
exponiendo, pero como era un hombre honrado aunque estaba equivocado, cuando descubrió
lo único importante dijo: “Nos hiciste Señor para ti y nuestro corazón está
inquieto hasta que no descanse en Ti”.
No hay otro camino, convéncete
y toma decisiones.
Gracias por seguir ahi! Que descanso leer esto después del caos de mañana que he tenido. Este blog es un soplillo de aire fresco!! No me olvido!! Bonita cita también la del Papa Francisco y... no quites a Mafalda!
ResponderEliminarDesde este rincón de España, bs
Muchas gracias, eres de lo mas animante
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