Quinto peligro: Ciencia
sin humanidad.
El origen de este peligro es a mi juicio, el olvido que a
veces tenemos las personas de que no es ético ni moral valernos de nuestros
semejantes como si fueran “conejillos de indias”.
A veces pensamos que todo
vale para conseguir los propios fines o que todo vale en pro de la ciencia: No
todo lo que se puede hacer se debe hacer.
El límite está en el respeto a la
dignidad de las personas aunque todavía estén en la categoría de embrión.
Tengamos siempre muy
presente la frase que ya escribí hace pocos días: Dios perdona siempre, el
hombre algunas veces, la naturaleza nunca.
No hay comentarios:
Publicar un comentario