Contemple por un momento una cabina de avión…
¡Exige mucho ingenio, planeamiento, técnica y
sabiduría para construir una maravilla así!
Si alguien dijera que el avión y su cabina no fueron fabricados,
sino que surgieron por sí mismos, o por una misteriosa “sucesión de
casualidades”...
¿Cómo reaccionaría el equipo de ingenieros, diseñadores
y científicos que lo construyeron?
¡Consideremos ahora otras maravillas! Un banco de
peces, un gato, una mariposa, unos pájaros de colores diversos…
Cuanto más complejas, más genio se requiere del Científico,
Artista, Planificador y Ejecutor
Pensemos en
un hombre con todos sus órganos, huesos, músculos, sentidos… Algunos afirman
que es una coincidencia natural, sucesión de casualidades…
Pensemos en
el universo con todo lo que contiene, ¿también es sucesión de casualidades?
Mi
agradecimiento y aplausos al Gran Artista, la Inteligencia suprema,
creador de todas las cosas: Dios
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